La música suena.
No veo nada.
No logro verte.
Tu ves todo me dices.
Y me ves, desnudo frente ti.
Toco tu piel.
La música deja poco a poco de sonar.
Se deja atrapar por la oscuridad.
Lentamente.
Ahora te escucho.
Y logro verte.
Nos vemos todo.
Te veo el alma.
Tocas mi piel.
Y toco la tuya lentamente.
La música se queda en nuestra mente.
Es un acuerdo.
Acompaña al vaivén.
El placer del momento.
Te escucho gritar.
Me escuchas hablarte.
Cierro los ojos.
Quiero creer que cierras los tuyos.