Cosas irremediables, todo por coquetear con la estúpida paramnesia, cada pedazo de tonteria es una carga más, un peso más, un clavo, una incrustación sangrienta en esa mirada perdida, en esa alma que divaga y pierde el sentido de su propia existencia.
Estoy muriendo en el tiempo, encerrado en el pasado, casi perdido en tu espacio, en el dolor de tus piernas y los puntos ajenos del miedo, de esa extraña sensación de rabia, de esa oscura lealtad que le tienes a la compasión, a tenerte lástima, a creer en lo imposible, a que eres solamente, una mierda.